La cirugía ortognática es una rama de la cirugía maxilofacial que se encarga de corregir las deformidades dento-craneo-maxilofaciales para conseguir el equilibrio óptimo entre todos los elementos faciales del paciente.
Un implante dental es un elemento de titanio en forma de tornillo que se coloca quirúrgicamente en el hueso maxilar debajo de la encía con el objetivo de sustituir a la raíz del diente natural que falta.
La ortodoncia es una especialidad de la odontología que se encarga de corregir problemas oclusivos y de posición dental mediante diferentes métodos.
La estética dental es una especialidad de la odontología que trata problemas de salud dental relacionados con la armonía estética de la boca con el objetivo de conseguir una sonrisa perfecta.
La odontología es una de las ciencias de la salud que se encarga del diagnóstico, tratamiento y prevención de las enfermedades del aparato estomatognático, el cual incluye además de los dientes, las encías, el tejido periodontal, el maxilar superior, el maxilar inferior y la articulación temporomandibular.
La cirugía ortognática es una rama de la cirugía maxilofacial que se encarga de corregir las deformidades dento-craneo-maxilofaciales para conseguir el equilibrio óptimo entre todos los elementos faciales del paciente.
Un implante dental es un elemento de titanio en forma de tornillo que se coloca quirúrgicamente en el hueso maxilar debajo de la encía con el objetivo de sustituir a la raíz del diente natural que falta.
La ortodoncia es una especialidad de la odontología que se encarga de corregir problemas oclusivos y de posición dental mediante diferentes métodos.
La estética dental es una especialidad de la odontología que trata problemas de salud dental relacionados con la armonía estética de la boca con el objetivo de conseguir una sonrisa perfecta.
La odontología es una de las ciencias de la salud que se encarga del diagnóstico, tratamiento y prevención de las enfermedades del aparato estomatognático, el cual incluye además de los dientes, las encías, el tejido periodontal, el maxilar superior, el maxilar inferior y la articulación temporomandibular.
La cirugía ortognática requiere de una preparación y una serie de circunstancias a considerar. Es eso lo que se explica en este artículo.
El primer paso es siempre tomar conciencia de que necesitamos un tratamiento médico. Ya sea porque notamos que mordemos mal, nuestros dientes están mal colocados, nuestro mentón es muy prominente, enseñamos mucha encía al sonreír, nos duele la articulación de la mandíbula…Todas estas suelen ser las quejas de los pacientes cuando acuden por primera vez a nuestras consultas.
Sea quien sea el primer especialista que hable con el paciente, lo que debemos definir desde el principio es si lo que necesitamos es un tratamiento sólo de ortodoncia o si va más allá y debe acompañarse de una evaluación por parte de un cirujano oral y maxilofacial. Esto es muy importante dado que hay una serie de decisiones que deben de ser tomadas de forma conjunta por ambos especialistas. Cuanto mejor estén coordinados los profesionales que van a tratar al paciente mejores y más rápido serán los resultados obtenidos.
En Clínica Calvo de Mora trabajamos directamente con algunos de los ortodoncistas con más experiencia en casos quirúrgicos de cirugía ortognática de nuestro país.
El protocolo más clásico implica una fase de tratamiento ortodóncico antes de la cirugía ortográfica que oscila entre 6-12 meses. Depende de la dificultad de cada caso y de las técnicas de ortodoncia que debamos de usar para ese caso concreto.
A partir de ese momento generalmente el paciente trabaja más intensamente con el cirujano maxilofacial. Nos encargamos del análisis facial final, de marcar nuestro objetivo de tratamiento final y de hacer una simulación virtual de las diferentes opciones que podemos conseguir con la cirugía ortognática.
Posteriormente, en el laboratorio se realiza la denominada cirugía de modelos. En un articulador se planifican los movimientos y las osteotomías (cortes en el hueso) a realizar.
Estamos implicados en el nuevo desarrollo de estas férulas quirúrgicas sin necesidad de tomar medidas, todo gracias a nuevos programas informáticos y estudio con escáneres 3D.
Una vez tenemos dichas férulas quirúrgicas pasamos a la realización en quirófano de la cirugía ortognática. Esta se realiza en su totalidad por dentro de boca, sin dejar cicatrices externas. Gracias a la fijación rígida con mini placas de titanio, una vez que colocamos en su nueva posición el maxilar y la mandíbula, el paciente sale del quirófano, en principio, sin ninguna limitación para abrir y cerrar la boca.
Depende del tipo de cirugía ortognática que realicemos la duración de la misma varía enormemente. Desde 20 minutos para una SARPE. Hasta más de tres horas en una bimaxilar con rinoplastia y otros retoques estéticos. De manera habitual el paciente es dado de alta las 24 horas tras la intervención por cirugía ortognática y vuelve a vernos aproximadamente a la semana.
Las molestias se controlan con los anti-inflamatorios y analgésicos habituales y la posible infección con una pauta corta de antibióticos de amplio espectro. A partir de una semana, el edema suele ir despareciendo progresivamente. En la primera semana después de la cirugía ortognática es fundamental una dieta líquida (pasada por el pasa puré) y a partir de la segunda semana se puede iniciar una dieta blanda.
El tratamiento de ortodoncia se reanuda a las dos semanas tras la realización de la intervención.
Es en este momento cuando se realizan los ajustes finos de la oclusión. A los tres o seis meses después de la intervención se suele retirar los brackets. Es entonces cuando podremos valorar el resultado final, aunque la totalidad de la inflamación y la naturalidad total no la obtendremos hasta cerca del año postquirúrgico.
Si desea un tratamiento de cirugía ortognática con una perfecta coordinación entre ortodoncista y cirujano maxilofacial, con unos excelentes resultados y la máxima seguridad, no dude que Clínica Calvo de Mora le ofrece las mejores garantías para su caso concreto.